Prevención del fraude COMBATIENDO EL CRIMEN FINANCIERO - GESTIONANDO RECLAMOS DE MANERA MÁS EFICIENTE
DESCRIPCIÓN GENERAL
La detección del fraude es una parte integral de cualquier operación de gestión de pagos. Tanto si se encarga de salvaguardar los pagos para un banco, un proveedor de servicios de pago externo, un emisor de tarjetas o un adquirente, el fraude en los pagos para las instituciones financieras se enfrenta a retos cada vez mayores. Hay muchos patrones de fraude con los que hay que luchar para combatir el malware, los troyanos, el man in the middle, el phishing, el skimming y el ciberhacking, por nombrar algunos, y cada uno de ellos está en constante evolución por parte de los defraudadores para evitar su detección. La carga sigue recayendo en las instituciones financieras para proteger a sus clientes de las pérdidas por fraude y cumplir con las crecientes normativas y mandatos nacionales e internacionales.
Las compañías de seguros quieren maximizar la satisfacción de los clientes, reducir los costes de la gestión de siniestros optimizando sus procesos, cumplir con la normativa, reducir las pérdidas por siniestros fraudulentos y ser capaces de lograr todo esto dentro de un presupuesto de costes contenidos de la compañía de seguros. Los siniestros consumen casi el 80% de las primas de seguros en forma de pagos, pérdidas fraudulentas o costes de tramitación, según PwC. Por lo tanto, todo ejecutivo de seguros está justificadamente preocupado por optimizar la gestión de los siniestros y la detección del fraude.
Gestionar eficazmente los siniestros es una tarea compleja. Con tantos pasos y variaciones en cada proceso, no es de extrañar que las aseguradoras se esfuercen por mejorar sistemáticamente las operaciones de reclamaciones.